Representantes del movimiento de la llamada ‘España vaciada’ denunciaron este viernes en el Congreso de los Diputados el “despropósito” que supone el nuevo plan estatal concesional de transporte público por carretera, que reducirá “el 75 por ciento” de las paradas actuales y “condenará” a los territorios del interior de la Península Ibérica. Según los dirigentes de Soria ¡Ya!, Teruel Existe, Cuenca Ahora y La Otra Guadalajara, este proyecto, como otras políticas públicas, “está realizado por y para las ciudades”. “Siempre se perjudica a los mismos”.
En Soria serán 33 las paradas suprimidas si entra en vigor el nuevo plan tal y como está concebido ahora mismo. “Esto significa que en muchos pueblos de nuestra provincia no podrán coger ningún autobús”, denunció el portavoz de Soria ¡Ya!, Ángel Ceña, que considera que este proyecto es “una etapa más de un proceso de pérdida de derechos” que los ciudadanos de la provincia de Soria llevan sufriendo durante años. “Nos quitaron el tren entre los años 80 y los años 90 en una suerte de consenso entre los grandes partidos, PP y PSOE, porque no era rentable”, recordó antes de hacer hincapié en que la falta de comunicaciones e infraestructura “significa aislamiento, y aislamiento significa despoblación”.
Más allá de este nuevo plan, el representante de Soria ¡Ya! puso de manifiesto que el Ministerio de Transportes ha “abandonado” al transporte de viajeros. “Ni presta atención ni lo cuida”, señaló antes de recordar los incumplimientos de contrato que se están produciendo, como la reducción de frecuencias, de paradas o incluso de líneas completas. “No vamos a ceder ni un milímetro. Vamos a pedir que este nuevo plan se retire y que los contratos que marca el actual se respeten”, resaltó Ceña, que reconoció que han enviado cartas al ministro Óscar Puente, pero sin obtener respuesta. “Igual tenemos que ponerle un tuit”, apuntó con ironía.
Desde Teruel Existe, su secretario general, Tomás Guitarte, consideró que este nuevo plan “es un ejemplo clarísimo de las políticas de vaciamiento de los territorios que se realizan desde el Estado”. A su juicio, este proyecto, que intenta “imitar en su planteamiento al AVE, donde solo importan el origen y el destino”, perjudica el derecho de movilidad de los ciudadanos y “fomenta las dos ‘Españas’, una que tiene derecho a la movilidad y otra que no”.
